Volviendo a la intertextualidad, el neobestiario se ha vestido de neocrónica de nuevo para contar las posibles causas por las que esta neocrónica podría dejar de ser puramente manchega y trasladar su contexto a orillas del Tajo, por ejemplo, desde donde vine aquí, o a cualquier otro sitio que ofrezca posibilidades reales de construcción de caminos, canales o puertos porque aquí, ni los prometidos puertos secos se construyen. Ni las aves que tuvieron su parada en los humedales y lagunas de la zona encuentran ya agua porque no cae una gota, y cuando cae es insuficiente para enriquecer la tierra. Esta tierra ha sido siempre lugar de paso para estas aves, lo es cada vez menos y, probablemente no lo será más al paso que vamos.
Tendré que hacer como las aves de las lagunas, como las bestias inadaptadas del neobestiario, y tomarme esta tierra como tierra de paso. Aunque yo no vuele y aunque me sienta adaptado.
Esperaremos la llegada de las aves a las lagunas, vigilaremos su estancia y su paso, y veremos si se puede establecer una relación entre ellas y yo.